DJ Mind

La música electrónica ha encontrado en Dj Mind el sonido más envolvente. Engalanado de experiencia y habilidad en los platos, “El Minino” –apelativo cariñoso y amistoso- pincha todos los palos en un fervor de pista multifuncional. El mejor dj es el que hace bailar sin parar al respetable, sabe mirar desde el púlpito, adivinar el paso de baile, y en esto Francisco Javier Ortiz Sagrado es insuperable.

Sus sesiones ya son míticas desde el emblemático y recoleto club Emporio, agazapado en un subterráneo de Torremolinos. Sus matinales, sobre todo, son el bálsamo perfecto para quien arriba del sábado noche, o bien se ha levantado el día del señor para recibir la comunión con la música es estado puro, mezclada de paradas sugerentes, de subidones de personalidad indomable.

Sus comienzos datan del año 95, donde hace agujas en un pequeño club de house en Málaga. Siempre hemos pensado de que llegando de puntillas a los platos, con esa pequeñez que se hace órbita musical, pasaría con acierto por diversas salas en la capital malagueña. Conoce, así, de primera mano, el mundo de los colectivos de dj’s y toma nombre en fiestas privadas para más 500 personas.

Ese galope del personal le hace mover la contundencia de los acordes mezclados; del house al techno en la primavera del 97, y germina su producción fuera de las fronteras malagueñas en la sala Límite(Granada), como nombre premonitorio y personal de su etapa profesional. Todo esto lo adereza con colosales fiestas privadas en Jaén y Córdoba. Es entonces cuando consigue pinchar en el after más famoso de Andalucía, en sala Pincho Luna, donde se reunían más de 3000 personas alrededor del emblemático colectivo Satisfaxion.

Sin embargo, dj Mind, como salto cualitativo y buscando la cultura de club, retoma sus orígenes del mejor house en Kaleidoclub (Benalmádena), siendo residente también en la Sala Malibú (Plaza Mayor) en 2004.

Lo mejor y lo más infinito musicalmente hablando de Mind principia en el 2005, pues flanquea de manera maravillosa y sorprendente al dj y produtor internacional Miguel Picasso. El dominical mañanero de Emporio consigue sus mejores sesiones de la mano de Francis Ortiz. Él ha llevado su nombre artístico hasta su máxima expresión, propiciando un acto mental al mecanismo de su música. Pulsa el más vale maña que fuerza, travestido de las mejores galas de fiesta.

Es un dj en un púlpito cercano, llega a los platos casi poniéndose de puntillas, pero tampoco te mira por encima de hombro. El niño Mind sigue de memoria ese sonido internacional de refugio con olor a salitre urbano, o sea, el templo del house en la Costa del Sol.

Sus salidas de club le avalan como fiel promotor del sonido (puro) Emporio junto a Picasso: Danzatoria Club (Jaén) , Festival Freedom (Málaga), Dreamers (Marbella), Sala Deluxe (Sevilla) ,Isis (Marbella), Warholl (Málaga), Passion (Torremolinos), Boga Boga (Málaga); y un sinfín de salas malagueñas en los más diversos horarios ha acogido su destreza en los platos.

Por todo esto y más, dudamos si Mind ha compartido cabina con los más afamados dj’s nacionales, o ellos la han compartido con él, haciendo parangón al archiconocido chiste del Papa. Ciertamente, es un clásico muy joven que pincha como Dios, si éste fuera dj y levantara la cabeza para poner un vinilo y joder así la misa de los domingos.